Aquí tenéis una breve presentación:
El concierto empieza de manera suave para inducir al estado meditativo, facilitando así la liberación del subconsciente, elevando la vibración y regenerando el campo energético de los asistentes. Para ello se usan ícaros y canciones de la tradición de América del Sur para conectar con los puntos cardinales de la rueda de la medicina y los elementos. Así se sanan aspectos de la personalidad: el cuidador interior, el niño interior y las emociones, el guerrero interior y la mente y el espíritu interior.
Después hay canciones para recibir luz desde el Ser Superior y los Guías procedentes de la cábala y el judaísmo, en arameo.
Seguidamente hay mantras en sánscrito para elevar aún más la vibración y permitir así la sanación de bloqueos energéticos más profundos. Se propone que respondan todos las frases cantando a modo de kirtan.
Al final el ritmo de las canciones se vuelve más vivo para devolver el contacto con el cuerpo físico. Se propone algo de movimiento por la sala. Cerramos la actividad en círculo, agradeciendo la oportunidad y el trabajo realizado en el alma.
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